Durante la 24ª sesión del Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas de las Naciones Unidas (UNPFII), celebrada del 21 de abril al 2 de mayo de 2025, la Nacionalidad Waorani del Ecuador (NAWE) alzó su voz como máxima representación legítima de los pueblos Waorani, Tagaeri y Taromenane, pueblos en aislamiento y contacto inicial (PIACI), que habitan en el corazón de la Amazonía ecuatoriana.

En su intervención, el presidente de la NAWE, Juan Bay, denunció ante la comunidad internacional las amenazas que enfrentan los territorios ancestrales habitados por los PIACI como consecuencia de las actividades extractivas, en particular la explotación petrolera, que ha generado contaminación ambiental, así como pérdidas culturales y espirituales irreparables.

“A finales de los años 50, los Waorani fuimos forzados al contacto y nuestros territorios fueron divididos en bloques petroleros. En 2013, inició la explotación petrolera en el Bloque 43 ITT. ¡En todo este proceso los Waorani nunca fuimos consultados!”, señaló el presidente Bay, denunciando la violación sistemática de derechos colectivos, territoriales y del derecho a la consulta previa, libre e informada, así como el principio de no contacto, por parte del Estado ecuatoriano.

En su intervención plenaria, el presidente de la NAWE solicitó que el Foro formule recomendaciones al Estado ecuatoriano orientadas a:

• Garantizar los derechos de la Nacionalidad Waorani del Ecuador y de los pueblos en aislamiento Tagaeri y Taromenane, dando cumplimiento a la voluntad popular expresada en las urnas para dejar de explotar el petróleo en el bloque 43 ITT del Yasuní, hogar de pueblos indígenas en aislamiento y contacto inicial.
• Respetar el derecho a la autodeterminación de los pueblos indígenas y respaldar iniciativas como la Plataforma Financiera Wao Yasuní, que propone mecanismos de financiamiento directo para proteger la vida y los territorios indígenas, indispensables para el equilibrio climático global.

El Foro Permanente es un espacio clave para visibilizar las voces de los pueblos indígenas del mundo, y tiene la capacidad de asesorar a gobiernos, organismos internacionales y entidades financieras. Sus recomendaciones tienen un peso político importante y constituyen una vía para el desarrollo de nueva normativa internacional que contribuya a la garantía de los derechos de los pueblos indígenas.

Como resultado de reuniones previas al Foro, intervenciones de diversas organizaciones indígenas del mundo y expertos, en el marco del Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas de la ONU se han emitido una serie de recomendaciones clave, expresadas en relatorías, declaraciones y reportes generados antes y durante toda la sesión.

Estas recomendaciones constituyen una hoja de ruta fundamental para que los Estados y organismos internacionales reconozcan y garanticen los derechos colectivos de los pueblos indígenas. En el caso de la NAWE, respaldan exigencias históricas como la protección urgente de los pueblos en aislamiento y contacto inicial, el reconocimiento pleno de la autodeterminación indígena y de sus sistemas de gobierno, así como el impulso de mecanismos propios de financiamiento como la Plataforma Wao Yasuní, que permitan la protección del territorio ancestral y aseguren medios de vida sostenibles.

Recomendaciones del Foro vinculadas a las demandas de la NAWE

Entre los principales documentos se destaca la “Reunión de un grupo internacional de expertos sobre el tema: Los derechos de los pueblos indígenas, incluidos aquellos en aislamiento voluntario y contacto inicial, en el contexto de la extracción de minerales esenciales”. Entre sus recomendaciones se incluyen:

• Proteger a los pueblos en aislamiento y contacto inicial mediante salvaguardas legales que impidan el contacto forzado, reconozcan sus territorios y garanticen su supervivencia cultural y física.
• Declarar la intangibilidad e irreductibilidad de los territorios de los PIACI, prohibiendo por ley toda actividad extractiva, especialmente la minería y otras actividades vinculadas a la transición energética.
• Garantizar una atención sanitaria diferenciada y culturalmente adecuada, que respete la autodeterminación, proteja el acceso a recursos naturales tradicionales, y evite intervenciones médicas innecesarias o dañinas.
• Reconocer y respetar los sistemas tradicionales de gobernanza indígena, como base legítima para ejercer su autodeterminación y administrar sus territorios de acuerdo con sus propias formas de organización.

Otro documento clave es “La arquitectura financiera internacional y los derechos de los pueblos indígenas”, elaborado por Darío Mejía, miembro del Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas de la ONU. Este informe incluye las siguientes recomendaciones:

• Desarrollar mecanismos de financiamiento directo para los Pueblos Indígenas, con metas mínimas de asignación que crezcan progresivamente y que incluyan apoyo técnico y fortalecimiento de capacidades.
• Fomentar alianzas estratégicas entre los Pueblos Indígenas, organizaciones de la sociedad civil y organismos internacionales para una implementación más justa y efectiva de los proyectos.
• Implementar programas de formación específicos para líderes y lideresas indígenas en derechos internacionales, mecanismos de justicia y procesos de incidencia.

La participación de la Nacionalidad Waorani del Ecuador en el Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas reafirma la lucha del pueblo Waorani, por la defensa de los derechos colectivos de los PIACI y la protección del Yasuní y de todo el territorio ancestral Waorani. 

Las recomendaciones emitidas por este organismo internacional deben traducirse en medidas concretas por parte de los Estados, organismos no gubernamentales y empresas privadas. Defender la autodeterminación de los pueblos indígenas y proteger los territorios más biodiversos del planeta no es solo una cuestión de justicia histórica, sino una responsabilidad política urgente frente a la crisis climática global.

¡No se puede hablar de justicia climática sin financiar la defensa del territorio!